La calidad es vital en un blog. El contenido es el rey


Hay cuatro factores que van a influir decisivamente en que un blog tenga éxito y cuando hablamos de éxito estamos hablando de visitas, tráfico, lectores, audiencia o conceptos similares. Hay personas que tienen un blog para expresar sus pensamientos, vivencias, o una especie de diario. Otras, en cambio, lo usan como copia de seguridad, elemento de trabajo o información accesible en cualquier momento y lugar. Evidentemente, a los autores de estos dos tipos de blogs les da igual el tráfico, les da igual que sean visitados o que sólo lo hagan determinados tipos de personas. Pero si lo queremos es construir un blog de éxito, ya sea para ganar dinero o para hacernos famosos, necesitamos irremediablemente tener muchas, muchísimas visitas.

Esas visitas las vamos a conseguir a través de los cuatro factores: la calidad del blog, que depende de dos: el contenido y el diseño, la actualización del mismo y la interacción con nuestros lectores. Y todo esto puede tener una pequeña ayudita con el White SEO, la optimización de su búsqueda en Internet, pero sin trampas. Hay quien piensa que el dominio o nombre del sitio también influye. Hoy trataremos el tema de la calidad a través del contenido.

La calidad de un blog viene dada por su contenido, no todo el mismo tiene que ser necesariamente texto, también puede ser vídeos, audios, infografías, etc.

Content is king, el contenido es el rey, es una verdad absoluta en el mundo de la información, que siempre ha sido cierta, incluso muchísimo antes de que existieran el SEO y Google. Allá donde exista información, el contenido será siempre el rey, ya sea en Literatura, Ciencia, Cine, etc.

¿Cuál de los dos siguientes textos tiene mayor valor, el A o el B?


Texto A:

Uh Uh sigue sigue es lo + q no s puede hacer + sigue sigue sigue pedazo fiestón iiiiiiiiiiiii ++++++ no fue tp al ppio nd qndo stoi sigue sigue sigue


Texto B:

El zarapito esquimal fue la especie más pequeña de los zarapitos del género Numenius, constituido por 8 miembros. Hoy se piensa que pudiera haberse extinguido, criaba en la tundra ártica de Canadá Occidental y Alaska. Era una de las especies más abundantes en el siglo XIX, con una población estimada en millones de individuos, pasando a ser rara, por la caza indiscriminada en Alaska y Canadá. A pesar de haberse dado avistamientos, no hay constancia fiable de que la especie exista.


La respuesta poca duda tiene.

El A es una serie de expresiones sobre algo, pero que en su conjunto resultan incoherentes, redactadas en lenguaje SMS y por tanto difíciles de leer para quien no esté acostumbrado a ello. ¿Qué sabemos después de leerlo? Pues nada.

El B nos habla de una especie posiblemente extinta, el zarapito esquimal. ¿Qué sabemos después de leerlo? Nos ha proporcionado una información que no conocíamos, nos ha sido útil.

Ha aquí una de las características del contenido. Ha de ser útil. La información que proporciona debe tener utilidad, debe ser práctica. Esa utilidad siempre es relativa, ya que depende de lo que necesite el que lo está leyendo. Para la mayor parte de las personas, la información sobre tablets o tabletas será útil, en cambio la información sobre la reacción químico orgánica de la aciloína sólo será útil para estudiantes o especialistas en la materia. Y en esto hay que tener en cuenta otro factor de cara al posicionamiento. La competencia de información sobre tabletas es abrumadora, mientras que sobre las reacciones de la aciolína más bien no, por lo que será más fácil posicionar ésta, pero tendrá obviamente muchísimas menos visitas.

¿Siempre ha de ser útil un texto para que tenga valor? No del todo. Hay ocasiones en las que un texto o vídeo es jocoso, divertido o bien entretiene sin más y consigue muchísimas visitas. No aporta información, pero aporta entretenimiento o risas. Y no hay que desdeñar esto, pues muchos éxitos en Internet vienen de este punto de vista. El humor vende, como más adelante veremos.

Ha de ser original. No ha de ser una simple copia. Ahora bien,  no es lo mismo copiar y decir cual es su autor, ya sea de forma escrita o mediante un enlace, que es una cita; que atribuirte el texto como tuyo, que es un plagio, que no es legal, ni está bien visto. En todo caso, si tu texto está hecho de citas, aunque no haya nada malo en ello, va a aportar poco valor porque ya todo está en la red y siempre es mejor acudir a las fuentes originales.

Panda, el algoritmo de Google castiga severamente los textos copiados, ya sea en propias páginas o de ajenas, porque considera porque considera que aporta poco valor añadido a Internet. ¿Qué ocurre entonces cuando no queda más remedio que añadir texto copiado, como por ejemplo, leyes o textos históricos? Que tenemos que tener cuidado de que la proporción de este sea mínima para no ser penalizados por Google. ¿Y cómo lo podemos comprobar? Existen en Internet varias páginas para verificar si nuestro texto ya está en la Red, una de ellas es Plagium, pero hay muchas más.

No obstante, si queremos evitar la penalización siempre podemos recurrir a la paráfrasis, que es cambiar palabras, manteniendo el texto el mismo significado, cercano a lo que en periodismo se conoce como refritar un artículo. Esto se llama, en términos modernos spinner, y una ayuda la podemos tener en la página de Daniel Piñero. Hay que usar esta técnica en determinadas circunstancias, pero no conviene abusar de ella, ya que si decimos lo mismo que otros han dicho con otras palabras, no estamos aportando nada nuevo y la utilidad de nuestro texto no lo hace valioso.

Ha de estar bien redactado. También el algoritmo Panda castiga la mala redacción y las faltas de ortografía. Lo que es bueno, bueno parece. No hay más que ver los dos textos anteriores de ejemplo.  

Novedoso. ¿Quién va a querer leer algo que ya se ha dicho trescientas veces? Pero si aporta algo nuevo, un nuevo punto de vista, una nueva información. Volvemos a lo de antes: algo útil, en definitiva.

Por último y no menos importante, algo esencial y que se sobreentiende a todo esto que tratamos: hay que ser respetuoso. Se pueden expresar las ideas políticas, religiosas, éticas o de todo tipo, ya que afortunadamente vivimos en libertad, pero hay que hacerlo con respeto, educación y tolerancia. Ante todo, hay que ser elegante, que no significa ser servil, sino íntegro, ser persona de altos valores y principios. Si expresas tus ideas con educación y respeto, vas a tener público de todo tipo, tanto los que piensan como tú, como los que no, ya que estos van a entrar para el tener debate y dar "vidilla" y tú también te vas a beneficiar de ello, incluso vas a hacer amigos entre los que no piensan como tú. Pero si expresas tus ideas con fanatismo, insultos, odio, falta de respeto, al principio te seguirán cuatro fanáticos, pero al final te vas a quedar más solo que el uno. No merece la pena.

Y ya por último, el humor. El humor es algo común a todas las personas de la Tierra, aleja las penas, hace la vida más fácil y además es sano. Y atractivo, porque las personas con humor son más atractivas. Como lo son las webs y blogs en los que los temas son tratados con humor como El Blog Prohibido de Chuiso.

Tratando temas como Química Orgánica y la recolección del pepinillo, no da mucho juego para el humor, es más, en estos casos, estaría de más, pero sí que es útil tratando temas de manera personal, o incluso en los otros, si se sabe introducir en el momento y en el sitio apropiado.

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